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El extracto de sangre de drago, procede de la resina roja en forma de lágrimas del árbol Drago que se encuentra en México, Perú, Ecuador, Marruecos y tambien en las islas Canarias.
Las tribus del alto Amazonas, durante siglos, aplicaban esta resina sobre las heridas para detener el sangrado, acelerar la curación y proteger de la infección.
La sangre de drago es un "almacén" repleto de fitoquímicos que incluyen proantocianidinas (antioxidantes), diterpenos, fitoesteroles, fenoles simples, alcaloides y lignanos biológicamente activos. Los componentes activos más conocidos en la sangre de drago son un alcaloide llamado apsine y un lignano llamado dimetilcedrusina, con acciones antiinflamatorias y curativas.
En una prueba de laboratorio en Belgica, se demostró que la dimetilcedrina, el picnogenol y la tapsina (componentes naturales de la sangre de drago) curaban eficazmente las lesiones cutáneas. Se demostró que aceleraba la curación hasta 20 veces más rápido de lo normal.
A diferencia de los productos químicos, la sangre de drago fue capaz de estimular la contracción de las heridas, ayudar en la formación de una costra en el sitio de la herida, regenerar la piel más rápidamente y ayudar en la formación de nuevo colágeno.
En 2007, investigadores de China identificaron 8 flavonoides nuevos y 14 compuestos ya conocidos en el extracto de sangre de drago.
Las propiedades únicas de la sangre de drago lo convierten en un excelente activo en aplicaciones cosméticas dirigidas a la estimulación, el antienvejecimiento, la regeneración y la cicatrización de la piel.
Sangre de Drago procedente de agricultura ecológica.
No exponer a luz solar. Mantener en lugar fresco y fuera del alcance de los niños.
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