La Gaulteria tiene su origen en el norte de Estados Unidos y Canadá, aunque actualmente ya puede encontrarse en algunas zonas de Asia. Crece hasta unos 30 cm de altura. Su hábitat es montañoso, donde a menudo se encuentra protegida por otros árboles y arbustos más altos, aunque también crece en las llanuras de arena desiertas. Tiene grandes hojas, ovaladas, brillantes y dentadas y flores blancas ó rosadas en forma de campana, seguidas de brillantes bayas globosas de color rojo con un aroma muy pronunciado.
Las hojas tienen que ser maceradas durante 24 horas en agua caliente, con el fin de producir la fermentación que libera los elementos esenciales de los que se destila su aceite esencial de gaulteria.
Propiedades: Calmante, analgésico, antiséptico, antiinflamatorio, térmico.
Agotamiento físico, artritis y dolor de espalda. Propiedades térmicas. Relajante.
Tratamientos terapéuticos mediante masajes. Dolores musculares. Rigidez y reuma. Humectante natural. Cremas, pomadas y aceites de masaje. Muy eficaz junto con otros aceites como anticelulítico.
Su principal componente natural es el salicilato de metilo (el ingrediente activo de la aspirina) por lo que no debe ser utilizado en personas con alergia a ésta.
En consonancia con: Ylang Ylang, menta, mejorana, lavanda, abedul y vainilla.
Uso externo. Diluir en aceite vegetal ó crema/loción base.
La posología y uso interno deben ser prescritas y supervisadas por su médico.
Precauciones de uso: embarazo y lactancia.
Mantener fuera del alcance de los niños.
No exponer a luz solar. Mantener en lugar fresco.
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